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martes, 5 de abril de 2016

TOREO DE PURA LEY

FERIA DE SEVILLAHay toreros tuercebotas con un santo que les cobija y hay otros de calidad y clase con un santo de espaldas. Toreros que lo bordan, que hacen el toreo bueno, sin ventajismos ni alharacas, que son maltratados y ninguneados. Uno de ellos se llama Pepe Moral. Este torero hace dos temporadas lo bordó en Madrid y en esta mismísima Maestranza. No pasó nada. Lo mantuvieron en la celda del olvido.
Pepe Moral en Sevilla. Pero hoy, otra vez, ha dado un recital de ley torera, firme, plantado, tersa la muleta y exigente la muñeca para explicar cómo se torea al natural, con tersura pero con mando y en los derechazos exigió al toro su porción para que la embestida fuera más allá de lo que su menguada casta daba de sí. Para cerrar su lección entró a matar con infinita rectitud para dejar el acero en todo lo alto y tirar al de Torrestrella sin puntilla. Oreja de mucho peso que a lo mejor dejará en ridículo algunas que se corten cuando lleguen los carteles del gusto de los del gintonic y el rebujito.
La tarde de los torrestrellas, menguados de casta y presentación, dejó, sin embargo un toro de ensueño por su clase soberbia aunque, ¡ay!, de muy poquita fuerza y que estuvo a punto de volver a los corrales por su endeblez. El torero no quiso tirarlo y acertó porque el buen animalito se dejó torear a placer y a fe que Javier Jiménez se gustó de verdad, con reposo y temple especialmente en una tanda de naturales impecables de ejecución y remate. Exageró en alargar la faena en muletazos por bajo muy toreros pero que el toro acusó a la hora de igualar. Un pinchazo hondo y los dos avisos enfriaron el ambiente. Sin embargo cortó una oreja por la estocada al sexto después de una faena trompicad al manso con más picante de la corrida.
Miguel Ángel Delgado se llevó el lote del disgusto por su famélica casta. Hizo lo que puso con buen criterio, especialmente en el primero, por encima del toro.
Plaza de la Real Maestranza. Tercera corrida. Media entrada. Toros deTORRESTRELLA (5) de desigual presentación, nobles 3º y 5º, de poco fondo en general apagándose al final. MIGUEL ÁNGEL DELGADO (5), de blanco y plata. Pinchazo y estocada (saludos). Cinco pinchazos y estocada (silencio). PEPE MORAL (7), de gris plomo y oro. Pinchazo y estocada tendida (silencio). Estocada (una oreja). JAVIER JIMÉNEZ (6), de blanco y oro. Pinchazo hondo y dos descabellos. Un aviso (saludos). Estocada (una oreja).

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